Las zapatillas Balenciaga tienen su origen en París en el año 1937. Su fundador, Cristóbal Balenciaga era un modisto de mucho nombre en el País Vasco y en España, que veinte años atrás, había comenzado su carrera como empresario en San Sebastián.
Su destreza con la aguja, las formas novedosas y los diseños con volúmenes insospechados, reportaron a Cristóbal Balenciaga, una fama entre la clase alta de París, situándolo entre los referentes de la moda femenina en los años 40.
Balenciaga, alta costura, elegancia y modernidad.
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¿Cómo limpiar unas zapatillas Balenciaga?
Si tus zapatillas llevan cordones, lo mejor es retirarlos y lavarlos por separado, sumérgelos en agua con lejía, detergente o bicarbonato para que queden completamente limpios,
La suciedad gruesa en la suela de la zapatilla, se elimina primero con un cepillo de limpieza, después le pasaremos un paño húmedo con agua y jabón, si se nos resiste, utilizaremos un quitamanchas y un paño de pulir.
Esto te permite limpiar todos los materiales de las zapatillas fácilmente y eliminar la suciedad adherida. Ya sea cuero, ante, textil, microfibras o sintético, tus zapatillas se mantienen limpias y duraderas.